El cono OTOSAN proviene de una antigua tradición popular. El cono OTOSAN mejora las defensas naturales del oído y evita la acumulación de cera en el oído, lo que a menudo conduce a problemas como zumbidos, pitidos o sonidos alterados, presión en el oído y pérdida de audición.

El aire caliente producido por el cono llena suavemente el canal auditivo, suavizando la cera y, gracias a los vapores calientes de propóleo, proporciona una protección efectiva al oído. Este calor también regenera el flujo sanguíneo del oído, resultando en una sensación de bienestar y relajación suave.
El aire caliente ascendente crea un ligero vacío en la base del cono.

Esto ayuda en la eliminación de residuos, depósitos y agua del canal del oído, y restablece la tensión correcta del tímpano después de cambios bruscos en la presión atmosférica.

Possibilidad de terapias:
- Exceso de cerumen - eliminando el exceso de cera por el efecto de succión y calor;
- Irritación de los oídos - efecto calmante;
- Náuseas - reduce la presión de los fluidos responsables del equilibrio;
- Otalgia debido a otitis - favorece el drenaje de las secreciones;
- Presión auricular (migraña) - ayuda a equilibrar los fluidos que causan dolor;
- Sinusitis crónica - alivia los senos que se conectan con la trompa de Eustaquio.

Insertar el cono Otosan en el disco protector (con el lado plateado hacia arriba).
Encender la parte más ancha del cono.
Introducir la parte cónica del cono Otosan en el oído, sin llegar demasiado profundo, sosteniéndolo lo más perpendicular posible.
No debe haber humo visible entre el cono y el oído. Si hay humo visible, ajustar el ángulo del cono para lograr un mejor sellado.